Y siguiendo las buenísimas condiciones existentes en Telera, no nos resistimos a realizar otra escalada. Después de hacer la vía Sonia nos decantamos al día siguiente por la Superlulu. No teníamos mucha información de esta ruta pero teníamos buenas referencias y el buen tiempo, las condiciones del monte y la motivación nos hizo decidirnos.
Esta vía consta de un largo cotado de M6, otro de M5+, alguna goulotte y otros de campas de transición entre largo y largo. Según las condiciones claro, cada largo y su dificultad puede variar muchísimo, y lo que para nosotros fueron largos de transición podrían convertirse en largos agónicos de roca cutre o nieve azúcar.
Nosotros tuvimos suerte y pudimos gozarla y exceptuando el último largo de mixto que nos líamos bastante, el resto fue fluido y sin problemas.

Nosotros montamos la primera reunión en una especie de cueva situada a la derecha antes del mixto de M6. Sabiamos que ese largo se había escalado por el centro pero nos decantamos por bajar unos metros y atacar el largo por la izquierda. Para evitar roces exagerados montamos una reunión intermedia con un clavo y dos friends.


En total nos encontramos en todo el largo tres clavos y un espit antes del último tramo. Fue uno de los dos largos clave de la vía y no nos resultó exageradamente expuesto, pero si que había que ir lentamente y asegurando cada paso.


Para hacer este descenso vimos un rapel más arriba pero nos pareció más fácil destrepar los 10m y llegar a la siguiente reunión. En este tramo había varios indicios de retiradas como cordinos, clavos y demás. El siguiente largo de goulotte fue muy bonito pero la reunión estaba en el punto de mira de todos los proyectiles de nieve, roca y hielo que caían y no pudimos hacer fotos bonitas…
Una vez hecha la travesía la cosa se relajaba y después de una reunión en un espolón y de un corredor de nieve saliamos arriba con las nubes encima de nosotros. Pudimos bajar sin problemas.
Un placer Martin, hasta la próxima!!